viernes, 4 de marzo de 2011

Murphy es Toffee

Hace poco más de dos años... parece una eternidad, o al menos así nos parece a los Toffees, desde que una maldita tarde de febrero el Everton visitó St James' Park. Ese día, Murphy decidió que era fan de los de Goodison y ahí empezó la maldición.

En realidad, habían empezado a torcerse el último día de noviembre del año anterior, cuando Yakubu sufrió una rotura del tendón de aquiles, lesión que ha superado, sí, aunque nunca ha vuelto a ser el mismo. Su sustituto, Saha, también se retiró lesionado.

Las cosas ya comenzaron torcidas, recuerdo que me costó horrores conseguir un stream decente, me perdí casi todo el primer tiempo. Ya al final, cuando logré conectar, lo primero que ví fue una entrada criminal de Kevin Nolan sobre Victor Anichebe. En el parón subsiguiente, noté la presencia en el terreno de Segundo Castillo y un sudor frío recorrió mi espalda. Me lancé sobre la página de la liga fantástica para comprobar las estadísticas y mis temores crecieron: Arteta había sido sustituido por el ecuatoriano, indudablemente por lesión. Fueron minutos de angustia hasta que aparecieron las primeras noticias, nada alagüeñas: Arteta sufría una lesión de rodilla. No volvería a jugar hasta casi un año después.

Anichebe también salió muy mal parado, su baja se prolongó 11 meses con constantes recaídas, e incluso derivó en una demanda contra el violento jugador de los Magpies, resuelta recientemente con un acuerdo extrajudicial cuyos detalles no han trascendido. Siendo sinceros, la lesión de Anichebe es especialmente lamentable por producirse por una entrada violenta y antideportiva, si bien no creo que tuviera incidencia en los resultados posteriores. La del donostiarra sí se puede considerar clave: acababa de ser elegido mejor jugador de la 5ª ronda de la FA Cup con un maravilloso partido, una auténtica exhibición frente al Aston Villa -cuando los Villanos estaban en un momento realmente dulce-.



El equipo pudo aferrarse a la clasificación europea vía puesto (5º) en la Premier, incluso eliminó al Manchester United en semifinales de la FA Cup -por penalties, eso sí-. Pero las desgracias iban a continuar unos días después, Phil Jagielka, el central inglés que estaba cuajando una temporada sensacional, sufrió una rotura de ligamentos, uniéndose así a la lista de bajas de muy larga duración.



Y llegó la final contra el Chelsea, que comenzó con un gol de Louis Saha a los 25 segundos, pero las ausencias pesaron enormemente: cuando nuestra banda derecha estaba compuesta por Osman -horror- y por Hibbert -¡doble horror!- añadiendo la presencia de Yobo -¡infinito horror!- en el centro de la zaga, era cuestión de tiempo que los londinenses remontaran el marcador.

El gol de Drogba es especialmente representativo de lo que habríamos de ver en los meses siguientes y que aún perdura, el costamarfileño remata solo al borde del área de meta mientras Yobo y Lescott no tenían claro quién debía defenderle. Falta de concentración, comunicación y orden defensivo. Lo hemos visto ya tantas veces que nuestras retinas duelen por ello.

Y llegó la temporada siguiente, nuestras esperanzas se vieron truncadas al tener que intervenir de nuevo a Arteta por culpa de una infección en la rodilla, un caso rarísimo, pero que a esas alturas ya no tenía capacidad de sorprendernos: estaba claro que Murphy era Toffee. Arranque lento, con muchos puntos perdidos en partidos que debíamos ganar sí o sí... hasta que en noviembre reapareció Jagielka. Retomábamos la esperanza y se vieron mejoras importantes, como el buen nivel mostrado por Fellaini.



Se cayó en Goodison frente al Birmingham City en la FA Cup, aunque ese día se recordará por la emocionante vuelta de Mikel Arteta. Ya estábamos en enero de 2010. Aún no estaba en perfectas condiciones, pero esos 15 minutos nos supieron a gloria, pensábamos que se acababan los malos momentos. Que el español tuviera minutos limitados era normal, una lesión de ligamentos es posiblemente la peor que pueda sufrir un deportista, así que deberíamos verle volver poco a poco. Pero no, no iba a ser posible porque Fellaini, que estaba mostrándose en muy buena forma y finalmente adaptado a la Premier, sufrió una grave lesión de tobillo en el derby acabando en febrero su temporada. Igual que este año.

No creo en la suerte, los resultados son fruto del trabajo, pero la adversidad sí que existe. Y la mala racha Toffee comenzó un 22 de febrero de 2009 en St James' Park. Aun hoy dura. Esperemos que la visita del 5 de marzo de 2011 ponga punto final y Murphy decida cambiar de colores.

1 comentario:

  1. "y Murphy decida cambiar de colores"

    ¿A algún equipo en concreto?
    Podíamos poner nuestras "preferencias", sin limitarnos ala Premier.

    Voy a mojarme: "Sevilla"

    Pdta. Sobre esta entrada al blog, queda claro que le que sabe, sabe. Felicidades

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