viernes, 9 de julio de 2010

Al servicio de Su Majestad

La prensa patria despidió a Raúl. Se vieron lágrimas de sus más acérrimos defensores y cierto punto de revanchismo entre sus detractores. No debería tener más trascendencia que la marcha de un jugador importante en la historia del Madrid, pero ver las diferentes reacciones da que pensar. Como aficionados, que opinen lo que quieran, pero ese peloteo/linchamiento en lo que se supone que son profesionales de la información produce nauseas.

España ha ganado el Mundial de Fútbol. Muchas lágrimas, emoción, alegría, festejos... y durante el proceso, hemos visto cómo estaba prohibido criticar a Del Bosque. Se empezó con derrota frente a Suiza y se puso en entredicho el doble pivote Xabi-Busquets, aunque quedó inmediatamente silenciado porque Aragonés dijo exactamente lo mismo que pensaban todos y la misma prensa que había criticaba al seleccionador, pasó a descuartizar al que apartó a Raúl de la selección, al que empleó un sistema con el que no se identificaba pero que creyó el más adecuado, al que nos llevó a ganar la Eurocopa.



Torres no ha tenido un Mundial brillante, pero la prensa le ha señalado de forma persistente. No ha importado que se haya tenido que pegar él solo contra los centrales rivales ni el trabajo realizado, sino que no propiciaba goles que es, a fin de cuentas, su función principal. En los dos últimos partidos, Del Bosque le dejó en el banco y puso a Villa en su puesto, con el resultado que el asturiano estuvo aún más discreto que el Niño. Nadie lo señaló porque se veía que era extremadamente difícil destacar en esas circunstancias, las mismas aguas en las que había tenido que navegar el ex del Atleti.

Esa doble vara de medir se ha hecho aún más evidente en el caso de Navas, el rey del desborde frustrado, el capitán general del centro a ninguna parte, pedido por los comentaristas cada poco tiempo a pesar de que consiguió irse de su par frente a la poderosa Honduras un total de CERO veces, absorber el balón cuando España juega con combinaciones fulgurantes y tirar a puerta en cuanto se le pasaba por la cabeza aun cuando las condiciones no fueran las deseables. Pero Navas, sigue siendo el favorito de los del micro.

Pedro merece capítulo aparte, muchos lo hubiéramos llevado s Sudáfrica sin dudarlo, su estado de forma lo hacía muy lógico, pero se le ha visto desbordado por los acontecimientos y muy impreciso... que levante la mano quien haya leído una sola crítica a su juego, ¡hasta le llovieron elogios por un rato en la segunda parte de Alemania! Y pasaron de puntillas por su error al jugársela él solo cuando pudo haberle dado un gol cantado a Torres.

Y todo esto, ¿a qué viene? Hay una constante, y es que los medios responden a sus afinidades. La prensa tiene tres funciones: informar, formar y entretener. Hace tiempo que en España sólo se piensa en la tercera, y sólo si genera beneficios. La información es tratada como una mercancía más, y si no hay que vender, pues se inventa. Se supone que la información debe estar contrastada pero, en la prensa, las fuentes -cuando existen- son los propios interesados en transmtir según qué mensaje, convirtiéndose los diarios deportivos en los voceros de sus Señores. ¿Que se ha fracasado en la Liga? ¡Vamos a publicar todo tipo de rumores de fichajes ilusionantes!

A Del Bosque se le protege desde la Federación, a los jugadores se les promociona por intereses y amistades, al aficionado se le vende lo que quiere leer en lugar de lo que realmente sucede y los referentes de información ha terminado reconvertidos en magníficos envolotorios de bocadillos. Por supuesto, la Liga BBVA es "la mejor liga del mundo", que BBVA patrocine a los que lo dicen no tiene nada que ver. Y esto no pasa sólo en la prensa deportiva. O tempora, o mores!